sábado, 27 de septiembre de 2008

Leyendas Mayas

El canancol
Cuénteme, don Nico: ¿por qué pone ese muñeco con esa piedra en la mano en medio de su milpa?, pregunté un día a un ancianito agricultor.
Su cara se animó con una sonrisa de niño, en tanto que me contestaba: Sé que usted no cree, pero le diré: soy pobre, muy pobre y no tengo quien me ayude a cuidar la milpa, pues casi siempre cuando llega la cosecha, me roban el fruto de mis esfuerzos. Este muñeco que ve no es un muñeco común; es algo más; cuando llega la noche toma fuerzas y ronda por todo el sembrado; es mi sirviente... Se llama Canancol y es parte mía, pues lleva mi sangre. El sólo me obedece a mí... soy su amo.
Don Nico siguió diciendo: Después de la quema de la milpa se trazan en ella dos diagonales para señalar el centro; se orienta la milpa del lado de Lakín (Oriente) y la entrada queda en esa dirección. Terminado esto, que siempre tiene que hacerlo un men (hechicero) se toma la cera necesaria de nueve colmenas, el tanto justo para recubrir el canancol, que tendrá un tamaño relacionado con la extensión de la milpa. Después de fabricado el muñeco, se le colocan los ojos, que son dos frijoles; sus dientes son maíces y sus uñas, ibes (frijoles blancos); se viste con holoch (brácteas que cubren las mazorcas). El canancol estará sentado sobre nueve trozos de yuca. Cada vez que el brujo ponga uno de aquellos órganos al muñeco, llamará a los cuatro vientos buenos y les rogará que sean benévolos con (aquí se dice el nombre del amo de la milpa), y le dirá, además, que es lo único con que cuenta para alimentar a sus hijos. Terminado el rito, el muñeco es ensalmado con hierbas y presentado al dios Sol y dado en ofrenda al dios de la lluvia; se queman hierbas de olor y anís y se mantiene el fuego sagrado por espacio de una hora; mientras tanto, el brujo reparte entre los concurrentes balché , que es un aguardiente muy embriagante, con el fin de que los humanos no se den cuenta de la bajada de los dioses a la tierra. Esta es cosa que sólo el men ve.

La ceremonia debe llevarse a efecto cuando el sol está en el medio cielo. Al llegar esta hora, el brujo da una cortada al dedo meñique del amo de la milpa, la exprime y deja caer nueve gotas de sangre en un agujero practicado en la mano derecha del muñeco, agujero que llega hasta el codo.

El men cierra el orificio de la mano del muñeco, y con voz imperativa y gesticulando a más no poder, dice a éste: Hoy comienza tu vida. Este (señalando al dueño), es tu señor y amo. Obediencia, canancol, obediencia... Que los dioses te castigarán si no cumples. Esta milpa es tuya. Debes castigar al intruso y al ladrón. Aquí está tu arma. Y en el acto coloca en la mano derecha del muñeco una piedra.

Durante la quema y el crecimiento de la milpa el canancol está cubierto con palmas de huano; pero cuando el fruto comienza a despuntar, se descubre... y cuenta la gente sencilla que el travieso o ladrón que trate de robar recibe pedradas mortales. Es por lo que en las milpas donde hay canancoles nunca roban nada.

Es tan firme esta creencia, que si por aquella época y lugar se encuentra herido algún animal, se culpa al canancol.

El dueño, al llegar a la milpa, toma sus precauciones y antes de entrar le silba tres veces, señal convenida; despacio se aproxima al muñeco y le quita la piedra de la mano; trabaja todo el día, y al caer la noche, vuelve a colocar la piedra en la mano del canancol, y al salir silba de nuevo. Cuando cae la noche, el canancol recorre el sembrado y hay quien asegura que para entretenerse, silba como el venado.

Después de la cosecha se hace un hanincol (comida de milpa) en honor del canancol; terminada la ceremonia se derrite el muñeco y la cera se utiliza para hacer velas, que se queman ya en el altar pagano, ya en el altar cristiano.

Y calló el viejecito después de haber hablado con acento de creyente perfecto.

Leyenda tomada del libro "El alma de Campeche en la leyenda maya" de Elsie Encarnación Medina E.

lunes, 22 de septiembre de 2008

Mundo maya


Aquí le mostramos algunas de las zonas arqueológicas que no debe dejar de visitar y que ampliarán su visión en una odisea que lo llenara de energía y le revelará muchas emociones.

Xcambó

Para iniciar, visite Xcambó (lugar de la virgen o de la luna menguante). Se encuentra ubicado apenas a 4 kilómetros de Mérida dentro del municipio de Dzemul en la Costa Yucateca. Los vestigios se encuentran cerca del mar, lo que da una visita muy bella.

Aquí puede admirar pirámides y caminos mayas. En sus tiempos fue uno de los puertos más importantes para el desarrollo comercial y salinero de la época prehispánica.

Izamal

La también llamada Ciudad de las Tres Culturas se encuentra a 70 kilómetros de Mérida. Su carácter histórico combina rasgos de su pasado prehispánico, del periodo colonial y de la época actual, y ese es su gran atractivo. De hecho, se dice que es más antigua Chichén y Uxmal. Como dato, la milagrosa imagen de nuestra señora de Izamal ha sido declarada patrona de la Península.

Oxkintok

No es la zona arqueológica más famosa pero sí fue una de las más importantes. Su nombre significa “la piedra de los tres soles” y se encuentra a 70 kilómetros de Mérida. Oxkintok es mística y muy tranquila. Cuando usted pase por su puerta Tzat Tun Tzat se sentirá que entra en otro mundo.

Aké

Su nombre en maya significa “lugar de bejucos” y se localiza a 36 kilómetros al este de la ciudad. Como sitio prehispánico se caracteriza por sus sacbés (caminos), su arquitectura, recintos sagrados de piedra caliza. A la belleza del lugar contribuyen los cenotes cercanos.

Mayapán

Significa “capital maya” y es un sitio privilegiado de antiguos edificios dentro de murallas a menos de 70 kilómetros de Mérida. Los especialistas resaltan la importancia de Mayapán al acercar al viajero a la cuna de los linajes Cocom, Xiu y Canul.

Dzibilchaltún

Se encuentra muy cerca de Mérida (15 minutos) y es un parque natural de gran riqueza biológica, histórica y arqueológica. Aquí se pude apreciar la gran variedad de vegetación de la zona, sus especies típicas, la fauna e, incluso, sentirse como en un pasaje del Popol Vuh (el libro sagrado de los mayas).

En lo arqueológico admire construcciones como el Palacio y el Templo del Pedestal, así como la famosa Casa de las Siete Muñecas y el espectáculo natural que el Sol ofrece durante los equinoccios de otoño y primavera.

La Ruta Puuc

Si tiene tiempo puede hacer este viaje que incluye los sitios arqueológicos de Uxmal, Kabah, Sayil, Labná y las Grutas de Loltún, siendo el primero uno de los más famosos.

El recorrido inicia en las Grutas de Loltún donde disfrutará del espectáculo de la naturaleza con sus estalactitas y estalagmitas, después recorra Labná y conozca “los chultunes”, un tipo de cisterna para el almacenamiento de agua.

Labná o “casa vieja” destaca por su arco que representa una de las obras arquitectónicas más representativas del Puuc.

Queda Kabah, célebre por su famoso “Palacio de los Mascarones” y sus rostros de Chac (Dios de la lluvia).

Casi para finalizar, llegue a Uxmal o “La ciudad construida tres veces”. Aquí verá el Castillo del enano, el Palacio del gobernador, el cuadrángulo de las monjas y el Templo de las palomas con un espectáculo luz y sonido.

Otros destinos cercanos

Acanceh o conocido como “el venado agonizante” es necesario observar la relevante la labor de conservación de los monumentos antiguos.

Yaxuná (la casa de color aturquesado) es el extremo occidental de la más larga vía de comunicación prehispánica que presenta como evidencia el “sacbé“ que une a esta ciudad con Cobá, aquella otra gran ciudad junto a las lagunas y entre la selva a poco más de 100 kilómetros.

X-Lapak (paredes despegadas) viaje a Sayil (lugar de las hormigas) donde puede ver un museo al aire libre y admire a “Nueve mascaras”, una estructura prehispánica.

Y no olvide Chichén Itzá

Antes o después del concierto de Plácido Domingo no olvide visitar Chichén Itzá, la zona arqueológica de la cultura maya más famosa desde que es considerada una de las Nuevas Siete Maravillas del Mundo.

Descubra (o redescubra) su misterioso Observatorio Astronómico, el Templo de las Mil Columnas, disfrute del Juego de Pelota, su Cenote sagrado de los sacrificios y cada una de las joyas que la arqueología ha revelado de esta mágica y sagrada ciudad.

Mayores informes, galería, videos y paquetes turísticos visite www.mayayucatan.com.mx Por cierto, Mérida es una de las ciudades más hermosas de la República, es Patrimonio de la Humanidad, si hace base no olvide recorrer sus blancas calles.

viernes, 19 de septiembre de 2008

EL MAYAB.....LA MAGIA MAYA, LOS RITUALES Y CONJUROS...


Los sacrificios humanos

Los relatos más minuciosos sobre los ritos de sangre maya provienen del Período Postclásico. Entre ellos, la escena de la extracción del corazón de un guerrero para ofrecerlo a los dioses.

Los jóvenes guerreros pertenecientes a las élites enemigas eran las presas más codiciadas. En el caso de capturar a un gobernante, o a un jefe principal, la víctima era reservada para ser decapitada durante una ceremonia especial.

A la inversa, cuanto más alejado fuese el pueblo de un cautivo, geográfica o culturalmente, los mayas lo despreciaban para el sacrificio. Al decir de Todorov, las víctimas preferidas debían ser, simultáneamente, extranjeras y cercanas.

La selva imprimió por completo la percepción de la realidad. Los mayas creían que una energía biocósmica atravesaba a las personas, a los animales, a las plantas y a los seres inanimados, imprimiéndoles su razón de ser.

A mayor carga de energía, mayor era la categoría y la importancia de cada ser vivo, cosa, o deidad. Los mayas creían que el descomunal gasto que realizaban los dioses se reponía con la sangre humana de los sacrificios.

La creencia en el poder combustible de la sangre muestra dioses vulnerables. Por el contrario, destacaba el papel de los hombres para mantener el universo

lunes, 15 de septiembre de 2008

Entrega México a Guatemala presidencia temporal de Mundo Maya.


México, 15 Sep (Notimex).- El secretario de Turismo, Rodolfo Elizondo Torres, entregó al encargado de despacho del Instituto Guatemalteco de Turismo, Guillermo Novielli, la presidencia temporal de la organización Mundo Maya.
En el acto refirió que en los dos años en que México encabezó el organismo se presentó como producto específico en varias ferias internacionales; se concretaron acuerdos en materia de cruceros y para facilitar la conectividad aérea.
Durante la ceremonia, a la que asistieron representantes de México, Belice, El Salvador, Guatemala y Honduras, el titular de la Secretaría de Turismo (Sectur) explicó que Mundo Maya estuvo presente en las ferias de Londres, en noviembre de 2007, y Berlín, en febrero pasado.
También lo estuvo en las ediciones 2007 y 2008 del Tianguis Turístico de Acapulco, Guerrero, donde se presentó como un producto único, independientemente de las promociones de los países y estados mexicanos que lo integran.
En materia de cruceros se efectuó el seminario “Retos y oportunidades de la industria de cruceros en México y Centroamérica”, en Cozumel, Quintana Roo, en abril pasado y de ahí emanó la “Declaración de Cozumel”.
Dicho documento consiste en el compromiso de un trabajo conjunto para formular una estrategia compartida a fin de mejorar la competitividad y una distribución equitativa de los beneficios de esa industria, expuso mediante un comunicado de la Sectur.
Resultado de esa declaración es la firma del “Acuerdo para el establecimiento de un mecanismo latinoamericano de consulta y concertación entre ministerios de turismo de países receptores de cruceros”, suscrito la semana pasada en la ciudad de México, refirió.
Respecto a la aviación, se firmaron convenios para que cada país permita a dos aerolíneas de otro volar en destinos del Mundo Maya y autorizar vuelos con paradas intermedias en terceros países, detalló.
Por otro lado, Guatemala y Honduras solicitaron a México incorporarse al Programa de Calidad Moderniza Distintivo “M”, para lo cual se firmaron acuerdos con la finalidad de transferir el programa a dichas naciones. La organización del Mundo Maya fue constituida en 1992 y en ella participan México, Belice, El Salvador, Guatemala, Honduras y México con la finalidad de estimular el desarrollo turístico, cultural y la preservación ambiental de la región, puntualizó la Sectur.

sábado, 13 de septiembre de 2008

La magia de los ritos mayas


la adivinación en esta cultura se considera que sirve para conocer "lo inaccesible por el razonamiento normal" del pasado, el presente oculto y el futuro, pero siempre a través de las divinidades.

La diferencia entre una oración y un conjuro, explicó, es que en el primero el que reza se dirige a la divinidad como determinante del destino, mientras que el segundo es una "fórmula mágica", donde él mismo es el señor de su destino, que trata a través de las palabras de convencer a la divinidad para que esté a su favor.

Nájera aseguró que los mayas consideran que cuando hacen magia solo repiten actos y palabras previas de los dioses, ya que según su cultura el mundo se creó con palabras mágicas de los dioses.

Para conseguir realizar los ritos mágicos los mayas se ayudaban de plantas y hongos alucinógenos, especialmente del tabaco.

"Varios días de ayuno, sumado al canto, al baile, al olor del incienso, al tabaco utilizado de diversos modos, como mascado y fumado, y el uso de elementos psicotrópicos garantizaban la adivinación deseada", sostuvo.

También se empleaban y se siguen utilizando elementos más comunes, como arrojar granos de maíz, de fríjol o piedras, que se llevan en un envoltorio especial.

Incluso, en la época prehispánica los mayas poseían unos libros especiales para ayudar a descifrar los sueños, indicó, que podían revelar la causa de enfermedades entre otras cosas.

La cultura prehispánica daba también gran importancia a los augurios, representados en muchas ocasiones por aves como lechuzas.

viernes, 5 de septiembre de 2008

Los mayas


En una vasta y rica región de América, el pueblo maya creó una de las más originales y grandiosas civilizaciones antiguas. Los mayas no constituyen a un grupo homogéneo, sino un conjunto de etnias con distintas lenguas, costumbres y realidades históricas, pero que comparten rasgos que nos permiten integrarlas en una unidad cultural. A la vez, esta unidad forma parte de otra mayor, la cultura mesoamericana.
En este trabajo podemos observar los tres grandes períodos de la trayectoria histórica mayense, los cuales son: preclásico, clásico y postclásico.
También se ha hablado mucho de la "desaparición" de los mayas, pero esto constituye un error, ya que lo que desapareció fue su libertad y la gran cultura que crearon en la época prehispánica; pero los hombres mayas con sus costumbres cotidianas y buena parte de todas sus creencias permanecen aun en sus regiones originales, sustentados en su misma concepción ancestral del mundo y la vida.

2. Ubicación geográfica

La cultura maya cubrió el territorio sureste de lo que es hoy la República mexicana y que corresponde a los estados de Yucatán, Campeche, Tabasco, Quintana Roo y la zona oriental de Chiapas, lo mismo que la mayor parte de Guatemala, Honduras, El Salvador y Belice, cubriendo una extensión territorial que varía, de acuerdo con los diversos arqueólogos e historiógrafos, entre 325,000 a 400,000 Km2, teniendo por límite el Golfo de México y mar de las Antillas; el océano Pacífico; el río Grijalva (conocido en Guatemala como río Usumacinta), en el estado de Tabasco y el río Ulúa en Honduras y el río Lempa en El Salvador actuales.
Se les dividió para su estudio en tres grandes regiones o zonas naturales:
1ª - Zona Norte:
Que incluye los actuales estados de Yucatán, en su totalidad y la mayor parte de Campeche y Quintana Roo. En tal territorio el terreno es pedregoso y semiárido con partes bajas donde predomina una vasta planicie calcárea con vegetación de monte bajo, con clima regularmente seco y cálido en demasía. No hay ríos de superficie, pero el terreno es permeable y el agua se filtra rápidamente, formando corrientes subterráneas que se abren en bocas naturales llamadas "cenotes".
2ª - Zona Central:
Cuenta desde el río Usumacinta o Grijalba en el actual estado de Tabasco, hasta la parte oriental de Honduras, incluyendo también el Petén guatemalteco, Belice y parte de Chiapas. Tiene un clima caliente y húmedo, con lluvias abundantes en la temporada. La vegetación es de tipo tropical.
3ª - Zona Sur:
Comprende las tierras altas y la faja costera del océano Pacífico, con parte de Chiapas, Guatemala y El Salvador. El clima es templado y frío en las serranías, con zonas calientes y húmedas, pobladas de densos pinares y cipreses en su mayoría. Hay alturas que sobrepasan los 1500 metros sobre el nivel del mar.

3. Origen de los mayas

La trayectoria histórica de la civilización maya prehispánica se ha dividido en tres grandes períodos:

El preclásico
En el que se estructuran los rasgos que caracterizarán a la cultura maya; la agricultura se convierte en el fundamento económico, surgen las primeras aldeas y centros ceremoniales, y se inician diversas actividades culturales en torno a la religión.


El clásico
Que empieza alrededor del siglo III, constituye una época de florecimiento en todos los órdenes: se da un gran desarrollo en la agricultura, aumento en la tecnología, una intensificación del comercio, y se consolida la jerarquización política, social, sacerdotal y militar. Así mismo se construye grandes centros ceremoniales y ciudades, donde florecen las ciencias, las artes y la historiografía. Hacia el siglo IX, se presenta un colapso cultural, cuya causa pudo haber sido una crisis económica y, consecuentemente, socio-política. Cesan las actividades políticas y culturales en las grandes ciudades clásicas en el área central, muchas de las cuales son abandonadas, y se inicia el período denominado postclásico.

El postclásico
Iniciado alrededor del siglo X, termina con la conquista española en el siglo XVI. Ella puso fin al proceso cultural mesoamericano, y los mayas quedaron sometidos y marginados en sus propios territorios.
El período preclásico fue una época de crecimiento demográfico paulatino, y de progresiva elaboración de instituciones sociales y políticas para todas las sociedades mesoamericanas. Se observó el surgimiento de sociedades estratificadas a partir del preclásico temprano, en regiones tales como la costa del Pacífico de Guatemala, así como el desarrollo de cacicazgos durante el preclásico medio. Por el contrario, la evidencia disponible para las tierras bajas es menor, y apunta hacia un patrón de desarrollo relativamente tardío en relación con regiones vecinas.
La evidencia disponible indica que las tierras bajas se poblaron más lentamente que muchas otras regiones mesoamericanas. Sin embargo, a partir del preclásico medio se observa un crecimiento rápido de la complejidad social y política. Los hallazgos recientes en el sitio de Nakbé sugieren el surgimiento de cacicazgos a partir del preclásico medio, los cuales contaron con la capacidad de organización y la disponibilidad de mano de obra necesarias para la realización de proyectos de construcción de gran escala.
En resumen, los procesos que llevaron al desarrollo de las sociedades complejas en las tierras bajas mayas no están claros. Tal tema plantea problemas significativos, considerando las condiciones ambientales de la región. Del mismo modo, no hay explicaciones definitivas para el desarrollo de alguno de los centros más importantes de esa región, tales como el Mirador e incluso Tikal, en localizaciones aparentemente aisladas y pobres en recursos naturales, en especial el agua. Sin embargo, es evidente que los habitantes preclásicos de las tierras bajas de Petén supieron aprovechar al máximo las condiciones ecológicas del territorio que habitaban, los cuales implican tecnologías agrícolas suficientes para el sostenimiento de poblaciones crecientes. La búsqueda de explicaciones para estos procesos plantea un reto significativo para la investigación arqueológica.

Organización política
Los mayas primitivos se agrupaban en pequeños caseríos, distantes unos de otros. Posteriormente fueron erigidos algunos centros ceremoniales. La vida de estos primeros habitantes del área maya dependía enteramente de los elementos naturales y del cultivo y recolección de sus cosechas.
Con la vida sedentaria y la práctica continua de la agricultura primitiva, surgió lo que al principio fue el culto sencillo de la naturaleza y de los elementos ligados a la siembra, tales como el sol, la lluvia, el viento, las montañas, el agua, etc.
Habría que imaginar que las sencillas ceremonias eran oficiadas y dirigidas por el jefe de la familia. Posteriormente, con la tecnificación incipiente de la agricultura, la práctica religiosa fue organizada en forma más compleja y surgieron los primeros sacerdotes profesionales.
Los sacerdotes se convirtieron el los depositarios de la ciencia y adquirieron un poder político creciente que los transformó en una casta dominante. A ellos se debió el perfeccionamiento del calendario, la cronología y la escritura jeroglífica.
En el siglo IV de nuestra era, la cultura maya se había establecido sólidamente en el norte y en el centro del Petén. La religión maya se había convertido en un culto sumamente desarrollado y complejo.
Hemos visto cómo la primera etapa de la civilización maya transcurre durante el ciclo correspondiente a la caza, a la pesca y recolección. También hemos conocido la etapa correspondiente al cultivo de las primeras plantas o período inicial de la civilización agrícola. Durante esta segunda etapa surgió una nueva unidad política que era la aldea gobernada por un consejo de jefes o cabezas de familia.
La tercera fase del desarrollo de la civilización maya corresponde un orden social y económico, en el que predomina la mujer y se establece el matriarcado. La cuarta etapa de desarrollo se caracteriza por la consolidación de las formas esenciales de la civilización maya y por el paso del derecho materno al paterno definitivo.
En la época de mayor florecimiento de la civilización maya, la jerarquía del poder estaba conformada por:

Sacerdotes gobernantes
El sumo sacerdote maya (Ah-Kin-May)
El sacerdote (Halach Uinic)
Jefes y señores principales (Bacab)
Mayordomo real
Consejo de estado, integrado por los sacerdotes y gente principal
Jefes guerreros (Nacon)
Organización económica
La economía es muy simple, ya que la producción depende de los requerimientos familiares, pero poco a poco se genera una división del trabajo, que dará origen a la diferenciación de clases sociales.
Cuando se inicia la agricultura y los grupos mayences se hacen sedentarios, esa actividad se convierte en la base de la economía, complementada con la caza, la pesca y la recolección. El sistema agrícola de los mayas fue el de rosa o milpa, el cual consistía en derribar árboles y arbustos, quemarlos y después sembrar usando un palo aguzado, llamado bastón plantador, al inicio de la temporada de lluvias.
El descubrimiento de restos de obras hidráulicas indica que los mayas construyeron canales para riego, lo que les permitió una mayor producción agrícola. La tierra era explotada de forma comunal.
El comercio tuvo gran desarrollo. Se exportan productos como miel, copal, algodón, cacao, plumas y obsidianas.

Organización Social
La sociedad en este periodo es todavía de carácter tribal, es decir, grupos de familias relacionadas por parentesco, que comparten una cultura, un lenguaje y un territorio.
A medida que la agricultura se hace más compleja, creándose sistemas de riego e incluyendo el cultivo de productos comerciales, como el cacao y el algodón, aumenta la población y empiezan a surgir centros ceremoniales, así mismo se consolida la jerarquización de las clases sociales, que resulta de la división del trabajo.
En los centros ceremoniales y ciudades, que se multiplican durante la época clásica y cuyo gobierno fue de tipo teocrático, habitaba la clase dirigente, ocupada en funciones intelectuales, como la planeación socioeconómica, la proyección de obras públicas, la organización política, la creación de conocimientos científicos (matemáticas, astronomía, cronología, medicina) y la conservación, por medio de una desarrollada escritura, de la historia de los linajes gobernantes. Los especialistas (constructores, artistas y artesanos), así como los sirvientes, residían también en las ciudades, mientras que los campesinos, habitaban cerca de las siembras. También se realizó comercio a gran escala, constituyéndose los comerciantes en otro grupo social.
A pesar de todos los cambios ocurridos a finales del período clásico y en el postclásico, entre los que destacan el predominio de intereses pragmáticos y militaristas, la jerarquización social se mantiene firme; el único cambio parece haber sido la división de poder supremo en político religioso, que antes estuvieron concentrados en una sola persona. Según las fuentes, el estrato más alto estaba constituido por los nobles o hidalgos, llamados almehenoob por los mayas yucatecos, la gente de linaje ilustre, los destinados por decreto divino a gobernar sobre los demás, ya fuera con el poder político, con el poder religioso o con la fuerza de las armas. Así gobernantes (encabezados por el Halach unic, "Hombre verdadero"), sacerdote,(una jerarquía en cuya cúspide estaba el Ahau can, "Señor serpiente"), jefes guerreros y quizá los comerciantes, que tenían ciertas funciones políticas, pertenecían a esta clase privilegiada.
Bajo ellos, estaba el pueblo, los hombres sin grandeza o ah chembal uinicoob, "hombres inferiores", quienes se dedicaban a la construcción, a las artes, artesanías y a labrar la tierra. También existieron esclavos (pentacoob), que eran delincuentes, prisioneros de guerra, huérfanos e hijos de esclavos; pero ellos no fueron numerosos ni jugaron un papel importante en la sociedad.

4. Religión

Toda la vida de los mayas está inspirada en ella, de allí que hasta la organización del estado sea teocrática.
Los mayas rindieron culto a las fuerzas de la naturaleza, sus principales dioses fueron:

Hunab Ku (el creador), señor de los cielos y dios del día.
Itzamná (hijo de Hunab Ku)
Chac (dios de la lluvia, y fertilidad de la agricultura)
Ah Puch (dios de la muerte)
Yun Kaax (dios del maíz)
Esto nos muestra que la cultura maya era "Politeísta". Todas las creaciones mayas están fundamentadas por una concepción religiosa del mundo, ya que este se concibe de origen divino y perneado por energías sagradas que determinan todo acontecer. Estas energías son los dioses, que encarnan en las fuerzas de la naturaleza, como los astros y la lluvia (Chaac); y también son energías de muerte, como los dioses que producen enfermedades y la misma muerte. Pero esas deidades también tienen aspectos animales: el Sol se manifiesta a veces como una guacamaya o un jaguar; la Lluvia, como una serpiente; la Muerte como un murciélago o un búho, etc. En las artes plásticas se representa como seres fantásticos, mezcla, de varios animales y conformas humanas que llevan un atributo animal y vegetal, como ojos de serpiente, garras, colmillos y hojas saliendo de su frente.
El universo está constituido por tres grandes planos horizontales: el cielo, la tierra y el inframundo. En el cielo, dividido en trece estratos o niveles, reciben los astros, que son dioses, como la luna (Ixchel) y Venus (Nohok Ek). El espacio celeste está representado por una deidad llamada Itzamná, "el dragón", que se representa como una serpiente emplumada de dos cabezas o un dragón (mezcla de serpiente, ave, lagarto y venado). Este dios, que es el supremo de la religión maya simboliza la energía fecundante del cosmos, que infunde vida a todo el universo.
La tierra, es una plancha plana que flota sobre el agua; pero también se concibe como un gran cocodrilo o lagarto, en cuyo dorso crece la vegetación. Los mayas yucatecos la llamaron Chac Mumul Aín, "gran cocodrilo lodoso".

5. Arte

Los mayas clásicos desarrollaron, según las regiones, diversos estilos en arquitectura, pintura, escultura y otras artes, en las que desplegaron un alto grado de calidad técnica. La labor de los artistas estivo íntimamente relacionado con las características sociales, culturales y políticas de su entorno. El despliegue ritual era esencial para reafirmar el poder político. Los grandes conjuntos arquitectónicos, escultóricos y pictóricos servían como escenarios para la actividad ritual y cortesana, la cual involucraba el uso de artefactos lujosos, lujosamente elaborados, tales como vestimenta, adornos personales y otros de uso ritual. Entre dichos objetos, los de lujo también formaban parte de utensilios funerarios, cuyo grado que elaboración reflejaba la categoría del individuo en vida. En buena medida, el arte del periodo clásico se derivó de modelos originados durante el preclásico. Sin embargo fue en el periodo clásico cuando se alcanzaron los niveles más altos de elaboración artística, tanto en las artes monumentales como en los objetos portátiles.

Arquitectura
La planificación de los centros ceremoniales mayas siguió la topografía y condiciones del terreno, lo que determinó las diferentes formas y estructuras de las edificaciones. La arquitectura maya participó de las características generales de las culturas americanas, pero tuvo modalidades especiales, incluso dentro de su propio estilo (el "arco falso",- bóveda maya-, cresterías o peines, estelas y altares.,etc). Se registraron varios estilos arquitectónicos como el "estilo de Petén" en Uxmal; el "estilo Usumacinta:" En Palenque; el "estilo Puuc" de Uxmal, etc. Y, hubo además otro detalle muy valioso: el de la pintura integrada a la arquitectura.

Escultura
Incluye una gran variedad de manifestaciones: altares, estelas, lápidas, dinteles zoomorfos, tableros, tronos, jambas, columnas, figuras de bulto y marcadores de juego de pelota. Sus principales características son la utilización del relieve, la monumentalidad en el tratamiento de los temas, el uso del color en el acabado superficial, la dependencia del ámbito arquitectónico, la profusión de signos caligráficos y ornamentales, la relevancia de las líneas curvas y el carácter abigarrado y escenográfico de la composición. Las estelas conmemorativas son magníficos trabajos entre los que destacaremos las de Tikal, Copán, Quiriguá y Cobán. Se trata de enormes lajas de piedra clavadas verticalmente en el suelo, en las que los escultores mayas tallaron en bajorrelieve imágenes del jubileo de sus reyes. Se erigían al finalizar un periodo temporal concreto, cada cinco y cada veinte años, y en ellas, mediante jeroglíficos, se narraban los acontecimientos más importantes del reinado. Excelentes son los dinteles figurativos que flanqueaban las puertas de los palacios y templos de Yaxchilán, los altares de Piedras Negras y los zoomorfos de Quiriguá, aunque quizá la cumbre de la escultura maya sean los paneles de los edificios de Palenque. El palacio, y los templos de las inscripciones, el Sol, la Cruz y la Cruz Foliada, constituyen uno de los mejores ejemplos de cómo el hombre es capaz de plasmar en piedra su universo religioso.

Arte mural
Aunque los restos que han llegado hasta nosotros son muy escasos, la pintura mural del periodo clásico maya alcanzó una gran perfección técnica y una gran calidad artística, logrando un difícil equilibrio entre el naturalismo de los diseños y la gravedad impuesta por el convencionalismo de los temas. Aunque utilizan tintas planas carentes de perspectiva los muralistas mayas supieron crear la ilusión del espacio. Primero trazaban el dibujo en rojo diluido sobre una capa de estuco, después se pintaba el fondo quedando las figuras en blanco y posteriormente se iban rellenando los diferentes espacios con sus respectivos colores. Para sugerir la perspectiva y el volumen recurrían al fileteado de las figuras, la yuxtaposición de colores y la distribución de los motivos en diversos registros de bandas horizontales. Los murales más importantes que se conservan son los del sitio de Bonampak (Chiapas). Las pinturas ocupan la totalidad de las paredes de tres habitaciones de un edificio (790 d.C.). Relatan acontecimientos bélicos que incluyen las ceremonias preliminares a la batalla (cuarto I), la batalla (cuarto II) y el sacrificio final (cuarto III). Existen fragmentos de antiguas pinturas en Uaxactún, Palenque, Coba y Chichén Itzá.

Cerámica y lítica
De la misma forma que los muralistas mayas plasmaron escenas mitológicas y cortesanas en sus composiciones, los ceramistas reflejaron diversos aspectos relacionados con temas similares. La cerámica polícroma —asociada con el mundo funerario— fue la más extendida. La técnica era similar a la de los murales aunque jugaron también con las posibilidades expresivas que les brindaban el engobe y el pulimento. Suelen ser cilindros, platos y fuentes de distintas dimensiones donde la pintura cubría casi la totalidad de la superficie. Los perfiles de los dibujos se realizaban en negro sobre un fondo monocromo, crema o anaranjado. El otro estilo, del que se conservan muy pocos, llamado códice, recuerda la técnica utilizada por los escribas mayas sobre las tiras de papel vegetal estucadas y pintadas. Las figuras antropomorfas alcanzaron también una gran popularidad y perfección. Las llamadas figuritas de la isla de Jaina (Campeche) incluyen una variada muestra de tipos físicos diferentes. A esta lejana isla llegaban para enterrarse personajes ilustres de muy diversa procedencia, y los artesanos de la necrópolis preparaban los ajuares que habían de acompañarles en su viaje al mundo de los muertos (Xibalbá).
La talla de las piedras semipreciosas, en jade y obsidiana, suponen una valiosa aportación al arte maya. Figuras humanas, excéntricos y collares alcanzaron un grado de perfección que las hizo ser incluidas en los ajuares de las tumbas más principescas.

Tejido y arte plumario
Aunque las extremas condiciones de calor y humedad han impedido que estas manifestaciones llegaran hasta nosotros, las escenas figurativas que aparecen sobre distintos soportes nos permiten hacernos una idea de cómo debieron ser. Los reyes y dignatarios aparecen vestidos con taparrabos, camisas, capas, túnicas y mantas realizadas en algodón, piel y fibra vegetal. Los trabajos plumarios alcanzaron un gran desarrollo. Los artesanos mayas disponían de una tradición muy rica dentro del medio natural más apropiado.